Denis Villeneuve y yo


Es momento de incluir a Denis Villeneuve en mi lista de directores favoritos. Dune: parte dos me hizo ver que soy fan de varios de sus filmes y a continuación hago una breve reseña de ellos. Por supuesto, hay spoilers.

Collage inspirado en la obra de Villeneuve (Image Bing Creator)

La mujer que cantaba (Incendios) – (2010)

Inspirada en la obra teatral Incendios, de Wajdi Mouawad, quien me conoce, sabe que AMO esta obra. Tanto que no solo escribí una, sino dos entradas. Villeneuve adaptó la obra para su película y acabó nominada a Mejor Película Extrajera dándolo a conocer al mundo. En mi caso, primero vi la película y cuando la obra llegó a México la terminé viendo tres veces y lloré mucho.

Incendios esta en mi lista de películas favoritas. «Hay verdades que no pueden ser reveladas si no son descubiertas» dice la protagonista, Nawal Marwan, una inmigrante libanesa cuya petición al morir es que sus gemelos mellizos entreguen dos cartas: una a su padre y otra a su hermano que hasta ese momento no sabían de su existencia. «¿Puede ser uno más uno igual a uno?» Los mellizos descubrirán que sí, porque las dos cartas en realidad son para la misma persona, quien es su hermano y su padre a la vez. Este oscuro secreto será revelado a medida que conocemos la historia de Nawal Marwan y la promesa de siempre amar a su hijo. Una historia sobre la importancia del perdón y detener el odio criminal que se extiende sin sentido por generaciones cobrando miles de vidas. ¡Tan necesario para nuestros días!

Prisioneros – (2013)

Prisioneros comienza a definir mucho el estilo de Villeneuve: le gustan las historias bien contadas, aunque implique un desarrollo lento y exija al espectador paciencia. La historia aquí es un guion de Aaron Guzikowski.

El argumento es simple: la búsqueda de dos niñas secuestradas que se prolonga infinitamente hasta el punto de perder la esperanza. Nada ajeno a nuestra realidad, donde hemos visto amigos y conocidos desaparecer y jamás volver a saber de ellos. En ese sentido, Prisioneros se siente como a Zodiac (2007) de David Fincher: en la vida real, resolver un delito puede ser cosa de años, estar sujeto a equivocaciones y dejar al final dudas abiertas. Pero si le tienes paciencia, Prisioneros te deja muy safisfecho.

Enemigos Idénticos (Enemy) – (2013)

La película se inspira en El hombre duplicado de José Saramago. La idea es simple pero inquietante: un hombre que se encuentra con su «doppelganger», un doble idéntico, haciendo su vida en otra parte. Se aborda el sentido de la identidad, de cómo nos percibimos únicos y cómo puede alterarnos el descubrir que no lo somos. Quizá por su lentitud y profundidad, la película no encontró suficiente audiencia.

En mi caso, así pasó. Cuando me enteré de su existencia, ya había salido de cartelera y aún hasta la fecha es difícil encontrarla. Sigue en mi lista de espera.

Sicario – (2015)

Sicario es una película muy bien calificada de Villeneuve. Esta basada en un guion de Taylor Sheridan. Cuando salió, estabamos tan llenos de narcoseries que honestamente no quise verla. La vi hace unos meses. En esta, una agente del FBI es reclutada por un oficial y un misterioso personaje para que les ayude a llevar una serie de operativos «dudosos» en la frontera con México. Como podemos imaginar, no todo es lo que parece.

Admito que no me gusta mucho. Pero la aprovecho para destacar otros aspectos del cine de Villeneuve. No le gustan las soluciones fáciles y es fan de los plot twist. Le gustan los finales abiertos, con interrogantes que el expectador debe llevarse de tarea. Vemos también la constante presencia de figuras femeninas, a veces como protagónico, pero siempre con personalidades fuertes, que no pasan desapercibidas.

La llegada (Arrival) – (2016)

La Llegada es un excelente trabajo de ciencia ficción inspirado en la novela corta «La historia de tu vida» del super nerd Ted Chiang. Chiang especula, con mucho rigor, sobre lo que casi nunca vemos en las películas de extraterrestres: las barreras del idioma. ¿Cómo podríamos en realidad comunicarnos con otra especie? Pese a ello, hay otro tema en la película que resulta aún más profundo: el determinismo vs el libre albedrío.

Cuando la protagonista logra entender el idioma de los visitantes, descubre que «no hay tiempos», sino que para ellos el pasado, el presente y el futuro son solo parte de un mismo mapa. Conforme domina el idioma, ella consigue tener visiones de su futuro (aunque al principio creemos que en realidad son el pasado de la protagonista): ella se enamorará de su compañero de misión, se casará y tendrá una hermosa hija que morirá de una enfermedad incurable. Luego su esposo la abandonará. Pese a ello, al final vemos que ella elige vivir ese futuro.

Con elementos y presupuesto mínimos para este género, Villeneuve consiguió un exitazo. Si bien no es de mis favoritas, debo reconocer que la historia es tremendamente inteligente y profunda.

Blade Runner 2049 – (2017)

A Villeneuve le tocó dirigir el proyecto que le tocaría a Ridley Scott: la continuación de la icónica Blade Runner de 1982, inspirada en la novela de «¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?» de uno de mis grandes genios, Philip K. Dick. Lo admito, mis expectativas era altísimas, pero también hay que aceptar que no fue lo mejor que pudo hacer Villeneuve. Después de sus casi tres horas, salí decepcionado. Yo esperaba algo más de acción y me topé con una historia que me pareció exageradamente ridícula. Un tiempo después, cuando llegó a las plataformas de streaming, decidí darle una segunda oportunidad y, comprobé que sí es lenta y aburrida, pero no tan tonta, en realidad tiene buena profundida filosófica.

La primera entrega de Blade Runner imagina un futuro donde el avance tecnológico nos lleva prácticamente a difuminar la línea de distinción entre un humano y un androide. ¿En qué momento, si es que existe la posibilidad, deberíamos de admitirlos a dichos androides como humanos? ¿Qué nos hace realmente humanos?

Siguiendo con esa linea, la segunda entrega da un paso más. Plantea la situación de androides que ¡han sido capaces de procrear descendencia! A mi me sonó absurdo la primera vez. Sin embargo, si vienes de una historia donde un androide se vuelve indistinguible de un ser humano, ¿qué te impide dar ese siguiente paso? La realidad es que una vez que resuelves ciertas cuestiones, la idea ya no es tan extraña y sí da mucho qué pensar. En esta segunda parte, el protagonista llega a creer que quizá él sea el hijo del androide en cuestión. Al final no resulta así, pero sí da varios temas para pensar sobre la conciencia y las memorias, aquellas cosas que nos hacen sentir tan seguros de nuestra identidad y realidad pero, ¿lo siguen siendo cuando se logra jugar con ellas?.

Dune: parte uno – (2021).

Dune esta basada en la novela del mismo nombre de Frank Herbert. Retrasada por la pandemia y obligada salir simultáneamente en cine y en plataformas de streaming, su estreno resultó algo atropellado. Es un producto de buena calidad pero algo aburrido. El problema fue que Villeneuve se enfocó en construir todo el andamiaje que soportaría toda la gran historia que vendría después. Se arriesgó y afortudamente logró que hubiese una segunda parte. Luego que ves la parte dos, valoras mucho la primera parte; sin embargo, creo que Villeneuve debió hacer algo para no perder tanta audiencia con la primera entrega.

Dune: parte dos – (2024).

Audiovisualmente la película me ha cautivado en todos los sentidos, se han cuidado muchos detalles. Me recuerda que, como Nolan, mi otro director favorito, a Villenueve le gusta alejarse siempre que sea posible del CGI y quebrarse la cabeza con soluciones ingeniosas. La diferencia es notoria y se disfruta de principio a fin.

Pese a los ligeros cambios de la novela original, creo que Frank Herbert se sentiría orgulloso de que se cuente la historia correcta: la construcción de un falso mesías. Aquí vemos la transición de un incrédulo Paul Atreides que niega aceptarse como «el elegido» a un personaje más oscuro que no le queda otra mas que admitir «su destino». Los intereses del imperio concluyen que lo que mejor le viene al planeta Duna es una guerra santa. «Subestimas el poder de la fe», le dice la princesa Irulan al emperador. Y a través de esta historia lo mismo veremos retratado a los dictadores carismáticos, a los líderes religiosos o el fundamentalismo islámico.

En conclusión, Villeneuve va por muy buen camino. Ya tiene aprobada la continuidad de Dune para una tercera entrega y esperemos que se tome el suficiente tiempo para hacer algo espectacular. Por el momento, ya ocupa un lugar en mi lista de directores favoritos.


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